La arquitectura gótica se difundió en España a finales del siglo XII con relativa rapidez desde su nacimiento en Francia, aunque su consolidación fue paulatina. En la provincia de Valencia este arte fue denominado ‘arquitectura gótica mediterránea’ que, junto al desarrollado en Cataluña y Baleares, transmitían una fuerte personalidad diferenciada del gótico castellano. Ésta fue época de construcción de iglesias, principalmente, que presentaban características en común, como son la sencillez y los espacios abiertos.
Aunque la arquitectura gótica clásica francesa se asociaba a ambientes más norteños y poco luminosos por lo general; en el mundo mediterráneo, marítimo y soleado floreció una expresión gótica particular y distinta. Esta arquitectura gótica aragonesa y mediterránea comparte con el gran gótico europeo las estructuras abovedadas con crucería, pero la disposición espacial es muy diferente.
Un ejemplo de este arte lo encontramos en la comarca de la Safor, en una ruta que une con el interior de la Vall D’Albaida y La Costera, a unos pocos kilómetros de la ciudad de Gandía. Junto a los municipios de Ròtova y Alfauir encontramos el Monasterio de Sant Jeroni de Cotalba un edificio fundado en el siglo XIV donde se alojaron durante años diferentes reyes. Merece la pena visitar este impresionante lugar que conservó su función de monasterio hasta el siglo XIX y nos presenta un trozo de la historia de la provincia.
También en la comarca de la Safor se erige el Monasterio de Santa María de la Valldigna fundado por Jaume II ‘el Just’ y cuya primera fase de construcción, en torno al siglo XIV, es esencialmente gótica.
Otro lugar símbolo de este estilo es la Cartuja de Porta Coeli – Puerta del Cielo – que, ubicada a los pies de la sierra de Náquera, se construyó en la pequeña población de Serra. Se trata de la primera cartuja construida en el ‘reino de Valencia’ y la tercera en la ‘Corona de Aragón’. Ésta supone una de las joyas arquitectónicas más desconocidas de la provincia, puesto que es muy difícil adentrarse en ella y visitarla. La iglesia de origen gótico y estilo neoclásico contiene, además de cuatro claustros, un acueducto que transporta agua hasta el edificio.
Toda una ruta de monasterios y edificaciones para descubrir de primera mano el arte gótico valenciano y adentrarnos en la historia de la provincia de forma curiosa y activa.
Foto 1: Wikipedia
Foto 2: Wikipedia