Las fiestas de Sant Miquel de Llíria son, sin lugar a dudas, las más importantes de la ciudad. Su origen parece remontarse 600 años atrás, cuando en 1.326 el rey Jaime II fundó el monasterio de Sant Miquel, uno de los monumentos más emblemáticos de la ciudad, con el objetivo de impulsar económicamente a la localidad. No obstante, no fue hasta el siglo XIX cuando realmente se reconocieron como fiestas religiosas patronales, celebrándose desde entonces durante la segunda quincena de septiembre. ¿Quieres conocer en qué consisten?
Uno de los actos más esperados es el popularmente conocido como ‘la Baixà’ donde transportan la imagen de San Miquel desde su Real Monasterio hasta la Iglesia de la Asunción a través de una solemne procesión donde los fieles y festeros acompañan al santo portando cirios y velas. Todo ello se culmina con una misa para honrar a su patrón. Al día siguiente se vuelve a sacar la imagen, esta vez para realizar una procesión por el pueblo y continuar con los homenajes. No será hasta el tercer día cuando vuelvan a subir al santo, en este caso a través de ‘la Pujà’. En total, tres días de festejos verdaderamente emotivos para los lirianos de toda la vida, devotos a su patrón.
Por supuesto, la música no podría faltar en una de las ciudades musicales por excelencia, donde la tradición melódica es uno de sus pilares clave y, por tanto, protagonista indiscutible de sus fiestas. Cada año se celebra el popular Concierto de Bandas, el cual cuenta con la participación de la Unión Musical y la Banda Primitiva de Llíria, todo un espectáculo musical de alta calidad que se ofrece al alcance de cualquiera.
Además de los actos religiosos reglamentarios, el ayuntamiento prepara varios espectáculos lúdicos y culturales para que tanto los vecinos como los visitantes puedan disfrutar de la fiesta al completo. Ejemplo de ello es el concierto de música donde cada año acude algún artista de renombre para amenizar las noches edetanas, así como las indispensables verbenas y noches temáticas pensadas para que el pueblo entero disfrute el máximo de esos días.
Y como colofón, Llíria cierra sus fiestas a Sant Miquel con una Semana Taurina que cuenta aproximadamente con 30 cerriles. Los aficionados taurinos podrán disfrutar con los más de 20 actos preparados para estas fechas. Entre ellos se incluyen toros embolados, entradas de toros y caballos – las populares desencajonadas – , encierros, concursos de ganaderías y muchas actividades más. Cada año son cientos los amantes de los toros que acuden y participan en estas fiestas. Además, aquellos que prefieran guardar las distancias con estos animales, pueden alquilar un cadafal, que suelen salir a sorteo unos días antes, y estar presente en todo momento sin perderse nada.
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