La repostería tradicional valenciana cuenta con una amplísima variedad de productos y dulces populares que en muchas ocasiones suelen coincidir con alguna fiesta tanto local como provincial. En general, encontramos en estas delicias una gran influencia musulmana, especialmente por el uso de las almendras y la miel.
Una de las principales delicias es la popular mocadorà, consistente en una bandejita de pastelitos elaborados con mazapán en forma de frutas y verduras de colores que, además, suele ir acompañada de un pañuelo (antiguamente se entregaban envueltos en él). Éstos se realizan el 9 de octubre, una fecha doblemente señalada para los valencianos. Por un lado, se celebra el día de la Comunidad Valenciana en conmemoración a la conquista de la ciudad de Valencia por el rey Jaume I. Y por el otro, este día también está establecido como su “San Valentín” particular ya que coincide con la festividad de San Dionisio, considerado tradicionalmente por los valencianos como el patrón de los enamorados. Por eso, además de celebrar el conocido 14 de Febrero, es habitual que el ‘9 d’Octubre’ los novios valencianos regalen a sus parejas la tradicional mocadorà – también conocida como dulces de ‘San Dionís’ – como símbolo de su amor.
Un poco más tarde, y coincidiendo con la festividad de Todos los Santos, surge un nuevo manjar temporal. En esta ocasión, los ‘huesitos de santo’, los ‘buñuelos de viento’ y los panellets, que’ se convierten en los protagonistas de la sobremesa. Éstos, en cuya elaboración también destaca el mazapán como ingrediente principal, están muy extendidos por toda la Provincia de Valencia y suele ser un postre que no falta durante este día.
En Navidad, época por excelencia de los paladares más golosos, predomina sin lugar a dudas el turrón. Originario, entre otros, del municipio Valenciano de Casinos, es impensable concebir una mesa navideña sin turrón. Elaborado principalmente con Almendra y miel, cuenta hoy en día con multitud de variantes capaces de satisfacer todos los gustos.
Durante la Semana Santa en Valencia es muy típico acompañar estas fiestas con ‘la mona de pascua’ y el ‘panquemado’, ambos realizados a base de harina, huevo y azúcar. En los dos casos, la masa es prácticamente igual y la única diferencia es la presentación. Este último se sirve como un pan redondo con azúcar espolvoreada por encima, mientras que la mona suele presentar formas variadas, además de un huevo duro pintado de color o de chocolate, en función de las preferencias.
Por supuesto, los grandes acompañantes de la horchata, los fartons, no podían faltar en esta lista de dulces típicos valencianos. Es un bollo ligero y esponjoso elaborado con productos naturales e ideal para mojar en esta bebida.
Otros dulces que destacan por su tradición geográfica, pero que no se enmarcan en ninguna época del año son, por ejemplo, los rosegones, hecho de harina, huevo, azúcar y almendra que se caracteriza por su dureza. Su nombre, que en valenciano viene del verbo rosegar significa roer debido a que como ya hemos dicho su textura es sólida.
También son remarcables el Arnadí, el Arrop i tallaetes o el Micalet, entro otros muchos, todos ellos arraigados en la repostería valenciana y cocinados a través de recetas centenarias que han pasado de padres a hijos.
Fotos: Jasuca y Carlos Varela