Siendo Valencia una de las ciudades más importantes de España a nivel cultural y económico, la masificación de personas por toda la ciudad puede ocasionar que en ocasiones nos sintamos agobiados. Por ese motivo, es un verdadero placer que en la zona litoral haya un lugar único y especial, donde se concentran gran variedad de elementos naturales, además de una flora y una fauna específicos del sitio. Nos referimos al famoso Parque Natural de la Albufera de Valencia.
La Albufera es el mayor lago de agua dulce que hay en la Península Ibérica debido a la incidencia de los barrancos o acequias, ofreciendo una imagen que combina la labor llevada a cabo por el hombre y la belleza de la madre naturaleza. Con los años, la zona de la Albufera ha ido consagrándose como un lugar propicio para poder desarrollar aspectos de valor agrario, turístico e industrial, lo que ha generado en una mayor llegada de población a la zona y, por lo tanto, una estampa diferente a la de décadas atrás. Por otro lado, el terreno siempre ha sido un lugar óptimo para albergar arrozales, un factor importante para la supervivencia del ecosistema debido a la cantidad de vegetación y animales invertebrados que podemos encontrar, imprescindibles para conservar una variedad heterogénea de animales vertebrados, especialmente aves.
Si por algo la Albufera recibe a miles de turistas cada año, tanto a nivel nacional como internacional, es por su diversidad paisajística. Una cualidad que le proporciona riqueza visual y le confiere una importancia ecológica enorme. Muchos son los curiosos que deciden visitar sus zonas más áridas, en parte para poder ver las dunas de arena que se forman, en contraste con todo el verdor de la zona irrumpida por el agua. En cambio, las zonas con más vegetación y flora animal se ubican en la Devesa, los Ullals, las Malladas y en la Laguna de la Albufera, que dotan a la zona de un ecosistema único y sorprendente, originando un lugar idóneo para los amantes de la naturaleza.
Dada su importancia, el Parque Natural de la Albufera es un lugar protegido a nivel nacional e internacional. Entre sus muchos títulos está el de Zona de Especial Protección para las AVES (ZEPA), forma parte de la Lista de Humedales de Importancia Internacional del Convenio Ramsar y está incluida en el Protocolo de Ginebra sobre zonas protegidas del Mediterráneo.
Por todo ello, su defensa y conservación de la Albufera de Valencia es vital para no perder un área vegetal y animal que es única en toda España, y que cuya belleza es difícilmente equiparable a nada que conozcamos.