En el post que le dedicamos a la inmensa oferta turística de Sueca hace unas semanas, os hablamos brevemente de su Ruta del Modernismo. Pues bien, ha llegado la hora de irnos hasta la capital de la Ribera Baixa para conocer la Sueca modernista. Se trata de un recorrido de unos 4 kilómetros que haremos en 2 horas o 2:30, y que podemos hacer por nuestra cuenta o en las visitas guiadas que se organizan desde el punto de información turística.
Arrancamos en el Asil dels Ancians Desamparats, monumento imprescindible y uno de los edificios más emblemáticos de Sueca. Destaca la fachada, claramente modernista. Del Asil dels Agüelets nos vamos al jardín del Paseo de la Estación, donde entre especies centenarias nos encontramos con un busto de Bernat y Baldoví y con el monumento al Maestro Serrano. En medio del paseo nos encontramos con el edificio de las Escuelas Carrasquer (1929).
Tras ver ese edificio giramos por la Calle de les Escoles. Al final de la calle nos encontramos con las Casas de Ignacia Cardona, seis viviendas que forman un único cuerpo construidas en 1913 para acoger a los inmigrantes que trabajaban en el cultivo del arroz. Nuestra siguiente parada es el Ateneo Sueco del Socorro, en la calle del Sequial -una de las principales de Sueca-. En el interior de este edificio obra de Joan Guardiola en 1927 encontramos una serie de murales de Alfredo Claros sobre el cultivo del arroz y la lámpara que se recuperó del desaparecido Teatro Serrano.
Estamos ahora en el Ayuntamiento, donde entramos para ver la cúpula de cristal y su escalera de mármol antes de seguir por la calle Sant Josep, donde está la casa de Pascual Fos (Pascual Bonaventura, 1909), que junto al asilo es el gran símbolo de la arquitectura modernista de Sueca. Bonaventura también construyó en 1917 la casa de Joan Fuster, unida a la de Pascual Fos por el interior. A continuación está la casa de Collantes, obra de Julià Ferrando Ortells en 1927.
Poco a poco nos acercamos al final, pero antes pasaremos por las Escualas Jardín del Ateneo, obra también de Pascual Bonaventura (1914) y las Escuelas Cervantes (1935). Ya solo nos queda una parada, el Matadero Municipal. Para llegar a l’escorxador, una obra más de Bonaventura, en este caso de 1921, hay que andar hasta las afueras del núcleo urbano en un agradable paseo. Hay que destacar que desde 2006 Sueca forma parte de la Ruta Europea del Modernismo.
Más información: Ajuntament de Sueca
Foto: Xavier