COLEGIO DE LAS MONJAS

En 1926, el Arzobispado había autoritzado a las monjas de la Congregación de las Religiosas de la Doctrina Cristiana a impartir clases en el centro, en ese momento conocido como el Colegio de Jesús. El edificio fue donado a la Iglesia por la vecina de Xeraco María Ana Castelló Torres.
Después de ser abandonado por parte del Arzobispado, fue usado como centro de reunión durante los años 70 y, más tarde como gimnasio. En la actualidad, el edificio está preparado para dar cabida a actividades.
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