Influenciada por la cercanía con la Comunidad Autónoma de La Mancha, parte de la gastronomía de estas poblaciones guarda cierta similitud, Por ejemplo, en Vallada, la Font de la Figuera y Moixent son célebres los llamados gazpachos. El gazpacho moixentí se sirve con pebrella y trozos de la llamada coca o torta ázima, una torta sin levadura, plana y fina que admite una mayor absorción del caldo. Los ingredientes de los gazpachos moixentins son diversos: conejo, pollo, perdiz, pebrassos (hongos), caracoles de monte, una cabeza de ajos, cebolla, tomate, pebrella, sal, aceite, y torta de gazpacho. ¡No te vayas sin probarlos!
Además, entre las comarcas de la Vall d´Albaida y la Costera se encuentra un paraje colorido lleno de historia, de viñedos y de atractivos turísticos que lo convierten en un lugar único: la denominada Toscana valenciana. Se trata de Terres dels Alforins, área que congrega la Font de la Figuera, Moixent y Fontanars, poblaciones llenas de bodegas centenarias ubicadas entre viñedos. Quienes se aventuren a conocer esta parte de la provincia de València realizarán un viaje enoturístico en el que relajarse, disfrutar de sus paisajes y degustar la exquisita gastronomía local. Lugares donde se elabora el vino desde tiempos ancestrales. Prueba de ello es el poblado íbero de la Bastida de les Alcusses, en el que se han encontrado pruebas del cultivo de la vid pertenecientes al siglo IV antes de Cristo.
QUÉ VER EN MONTESA:
- El Castillo de Montesa, situado sobre el montículo que domina la villa. En su interior se encontraban el convento, la Iglesia de la Orden, el Palacio del Maestre y los cuarteles. El terremoto del 23 de marzo de 1748 provocó el derrumbamiento de gran parte de la fortaleza, declarada Monumento Arquitectónico Artístico desde 1926. Para visitarlo, contactar con el ayuntamiento local mediante el teléfono 962 299 002.
- El Paraje Natural Municipal de la Mola, zona de escalada y donde poder realizar una pequeña ruta, cuyo inicio se dispone junto a la cartelería situada en el área recreativa de la Fonteta o el PNM Barranc de la Fosch.
QUÉ VER EN VALLADA:
- El conocido Paraje de las Ermitas, una zona natural a las afueras de la población. Se trata de un pequeño pulmón verde lleno de vegetación con diversas opciones senderistas. En verano en este paraje es posible disfrutar de la Saraella, una piscina clorada por normativa, de agua salada, en el interior de la provincia, el final perfecto a un recorrido por este entorno natural.
- Desde las ermitas se inicia el SL El Penyó, una ruta de menos de 10 kilómetros que descubre gran parte de los encantos naturales de Vallada. En este recorrido, además de subir al Penyó y su cruz, se puede visitar la Penya de l’Àguila, que ofrece unas impresionantes vistas; visitar los restos del Castell de Vallada, lugar desde donde disfrutar de una buena desconexión con vistas al municipio; y, por último, conocer el Túnel del Sumidor, aunque es recomendable ver únicamente su obertura por ser de acceso muy peligroso, solo apto para espeleología y con material adecuado (de hecho, puede ser mortal acceder a esta cavidad sin preparación, pues se trata de una de las cavidades en yeso más profunda del mundo).
- En el casco antiguo de Vallada destacan las calles San Cayetano y Santa Rosa como las más representativas.
QUÉ VER EN MOIXENT:
- La Bastida de les Alcusses, un poblado ibérico que se encuentra en la Partida de Les Alcusses, en les Terres dels Alforins. A pesar de que se puede visitar de manera gratuita y libre en horario de apertura (de martes a sábado), se recomienda la visita guiada (también gratuita), pues la experiencia será mucho más enriquecedora, que se lleva a cabo de miércoles a domingo y se debe concertar previamente mediante los teléfonos de los guías en horario de 10:30 a 14:00 horas, de miércoles a domingo (687 836 717 – 687 836 545 o labastida@moixent.es). Los horarios también están disponibles en la web de moixent.es.
- El Bosquet de Moixent, una joya patrimonial y natural del siglo XVIII. Se trata de una presa construida en el siglo XVIII que, en la actualidad, es un rincón de valor incalculable. Destaca el bosquecillo de carrascas centenarias del que toma nombre el paraje, así como el conjunto de pinos carrascos en el lado oeste de la presa, sin olvidarnos de las numerosas especies herbáceas o arbustivas muy apreciadas en la cocina tradicional valenciana, como el romero, la pebrella y el tomillo, o el esparto.
- También se recomienda realizar una ruta por la zona para conocer puntos como el VG Pedregal por la Senda del Vértigo, la cercana Cova Pates, la Cova de l’Aigua, El Bosquet y, ya en la misma población, la Torre Mora, la Cova Pare Moreno y la imponente Creu de Moixent.
QUÉ VER EN LA FONT DE LA FIGUERA:
- El casco antiguo, donde destacan la calle de San Cristóbal, donde es posible ver la Torre de la Natividad desde lejos; la Fuente de los Cuatro Caños, símbolo de la villa; el Teatro Juan de Juanes, sede de «La lira fontiguerense» (banda musical del pueblo); y el Museo Histórico-Etnológico, que muestra una antigua bodega de carácter industrial del siglo XVIII con todos sus útiles, y una pequeña bodega familiar, que incluye una almazara, una destilería, carros, maquinaria para la recolección de cereales y demás aperos de uso agrícola.
La Senda del Capurutxo, un recorrido que comprende la llamada ombría y microrreserva del Capurutxo, la solana del Capurutxo, la Casa Forestal y el Cim del Capurutxo o Creu del Capurutxo, pudiendo ampliarse a puntos como la Foradada y el Forat de les Cabres; la Cova Santa, una gran cueva solo apta para espeleología; o la Cova del Triangle (conectada con la Cova Santa